Wednesday, August 23, 2006

Volví del mar

Estoy.
Sin mácula ni estrella.
Sin huellas ni blancas cicatrices
escondidas en el cuerpo.
Tan vacía como siempre,
pálida y sin sed.

El viento empuja osamentas
de barcos encallados,
pero no logra limpiar el mar
y conmoverse.

Hay una perla en ese océano
que nadie toca,
que nadie llama.

Y se me incendian las piernas a las doce.

Tuesday, August 01, 2006

A veces la vida es un movimiento involuntario